Señales.

Hoy voy a hacer algo un poquito mas autobiográfico, no porque crea que tenga un sentido alto de auto-importancia, si no porque estoy en un mood de exponer pal de cosas de mi vida.

En mi vida siempre ha estado presente un dualismo mental. Un dualismo que no es especial en mi; todo ser humano la tiene o la ha tenido. Bajo mi optimismo siempre ha estado el pesimismo que dice que toda maquinaria en el cuadro de mi realidad tiene algo contra mi y hará todo lo posible por derrumbarme. Por el otro lado, en lo mas profundo de mi alma hay una fe, un optimismo que esta dedicado a desafiar este mecanismo a través de cuidadosamente observar las señales para poder esquivarme del próximo golpe. Es como fatalismos en una rueda rotándome constantemente, la cosa es no perderse ni un signo. Sobrevivencia por coordinación.

El principio de mi tercera década fue así. Constantemente en un estado de defensa que no me dejaba crecer. Muy ansiosamente atento a los signos para no ser violado por la vida y quedar en un estado de limbo como el de un tecato que se ha dado por vencido.

Ejemplo: Me acuerdo el día en que mi compañero Leroy y yo queríamos salir de la base y joder. Si, yo era un marinero de mierda y en este momento de mi vida no sabia ni lo que hacia. En ese momento en especifico mi amigo Leroy era solo un interés, y mutuo, porque el tenia el carro y yo la edad para el licor. Me acuerdo que compre dos cajas de cerveza bud light (12 cada una) y nos envolvimos de demencia como dos presos encerrados que se escapan. Después de destrozar jardines de casas de urbanización, de ir constantemente a velocidad excesiva, pararnos a gritar obscenidades y mear en parques, guiar bajo la influencia era evidente que ya no nos pasaría nada por más que empujáramos los limites. Había perdido cuenta de las cervezas que quedaban; para matar mi curiosidad fui a chequear y quedaban cuatro para ser exacto. Habíamos llegado al final de la aventura, me dejo en mi barraca y el se fue buscando meter mano con alguna puerca.

Yo ni se como se metió en problemas hasta la luz de hoy. Sé que los MP's le confiscaron el carro y lo registraron encontrando dos cajas de cerveza y solo cuatro cervezas sin beber, más el no tenia edad.
Me envolvió en su falta, no fue adrede, se que el era un cagao y por no mentir escupió mi nombre, pero antes de que lo aislaran, íbamos a pensar en algo.

Justo antes de llevar acabo el juicio de Leroy (que fue como un mes después del incidente), fui interrogado sobre sus acciones esa noche, para los efectos, yo siempre estuve en casa de una muchacha y el hizo todo eso solo. Cuando el Chief MP me pregunta sobre las cajas de cerveza yo le dije que las había consumido en casa de la muchacha. El no me creía tanto. Me pregunta sobre la cantidad que yo había consumido; solo me recordé del pequeño clip de memoria cuando observe en el asiento de atrás. El pregunto esto con un tono de importancia, no sé porque, pero le dije que había consumido 20 cervezas. En esos momentos fue que me aclaró que de haber ausencia de las cerveza que ya yo había contabilizado, se podrían considerar como bebidas que el consumió y por ende YO iba a tener cargos por suplir alcohol a un menor. Si fallaba en los dígitos aunque fuese por una me iban a clavar: reducción de rango, reducción de paga por X meses, trabajo después de horas de trabajo. Solo por ese estúpido detalle pude defenderme de un golpe de la maquinaria.

Esta es solo una de las muchas hazañas en donde los signos o las intuiciones que uno cree tan insignificantes me han ayudado a prevalecer.